28 jul 2012

solo un pez, lleva a el hombre a caminar sobre el agua...
El pez; precisa el viaje; incita a travez de ella.
Sabana!! tundra hermosa.
Pez en el desierto, oasis de asiedad...

2 jul 2012

Qué te puedo decir?...
¿conoces el mar?...
¿el viento?
No me conoces a mi. "Y ni yo me he explorado para decirte"
No conosco el mar, no conosco a esos delfines que juegan ahí abajo. No pertenezco ahí. No sé como amanece ahí adentro. "No lo recuerdo"... No se de la sensación; tanto,  como cuando una sábana ligera me es arrebatada para despertarme por las mañanas... "a  como cuando una ola me revuelca".
No conosco el mar, y seria arrogante y presuntouso decir que lo conosco, "como lo sería hablar de mi"... sin embargo lo hago sin querer, pues mi capacidad de recuerdos no es tan grande como la de historias que tiene el mar para mi, es por ello que prefiero vaciarme al hablar...

Del mar, conosco un poco mas de sus peligros, pues me hé atrevido sumergirme en el' "para esperar a mis amigos y extenderles mi mano ahí"... No conosco el mar, pues es cambiante. Esta mañana por ejemplo; no se atrevía a acercarse, y hoy, por la tarde; el estaba golpeando las paredes donde un dia llegue a escribir un nombre que prometí no entregar a el viento.

Del mar son los escritos profundos en mis ojos. Del mar son los recuerdos de mi consiencia, que ha sido el lugar donde mas claro le he escuchado...
Si conociera a el mar, le pediria que me devolviera todo lo que se há llevado.
Le pediría también esas piedras que has lanzado a el, Pues un día me dijo: Que para que tirar piedras al mar.  Le dije si eran problemas que los lanzara. Dijo' que los problemas son para resolverse.
Me sentí incapaz de lanzar una piedra de nuevo, pero hoy lo hice inconscientemente.

Pero también, le he robado muchos recuerdos a el, tantos destellos como estrellas. He robado al mar, para tí.
Algún día, te hablare de el.

No sé del viento' como el sabe de ti.  Pues casi imperceptible acariciábate el rostro y el cabello, mientras tú solo me escuchabas menos de cien historias, el viento te describía aquella historia de cuando bailó con el mar... A su vez, el a mi me empujaba. Sé muy bien que te mostró un ave blanca de pico amarillo y ojos negros; Y también, el vaivén donde le paseaba. Pero yo no tenia un recuerdo de pequeño "sobre un columpio" así que no te lo comente.

Sé muy bien que el Viento, el Mar y Yo, no nos llevamos desde la última vez que peleamos por ese ser onírico el cual tiene un alma y cayó a esta tierra.