Había estado planeando este día...
Por la noche' antes de irme a dormir, buscaba un reloj el cual pudiera darme la hora de mi despertar. Mas no encontré' si no solo un viejo reloj que: Tania, había puesto en mi muñeca al día de mi cumpleaños...
Desperté a las 5:40am para ponerme a estudiar según las instrucciones de Plancarte; "que en su metodología de aprendizaje predicaba con ahínco". Debía pasar gran parte del día con Alejandro, y no estaba del todo convencido debido a su actuar en la última vez que nos vimos (habíamos discutido por nimiedades), Sin embargo; estas entre amigos llegan a afectar' pues él, es un amigo de la infancia. Pensé: si esta madera tiene sus cicatrices que le dan su indivualidad, es gracias a cada una de mis amistades que le han tallado constantemente.
Me bañe: afeite mi rostro con navaja de un solo filo, el eco y el vacio de casa apaciguaba mi alma trémula al caer la lluvia de regadera...
Llegué a casa de Alejandro a la 8:20am; Paty, (su madre), salió a saludarme y a pedirme que le pintara su casa, "tal y como lo ha hecho estos últimos meses"... Alejandro gritó desde adentro que le esperara, pues no encontraba las llaves del auto. Descargué la mochila sobre el concreto roto, al pie del árbol de ciruelas de la india, esto: para ir a saludar a Charli, "el perro cafiblanco del vecino" cual emocionado manchó mi camisa blanca con sus patas delanteras y lamió las palmas de mis manos llenándolas de baba...
Al llegar a la linea para cruzar la frontera, Alejandro me dejó en la ruta peatonal, (mientras el cruzaba el auto)... Disminuí mi andar veloz para no dejar que el destino, ni el tiempo' eligieran quien habría de ir a mi lado el resto del cruce. Ahí conocí a Fernanda: una chava muralista que mas bien parecía bailarina "de las que cobran" y de gran clase, pues su vestuario no era nada vulgar, asemejaba cualquier chava sacada de alguna película de vaqueros. De tez blanca, cabello amarillo, ojos de un azul nunca visto e incomparables. Solo se que en ese azul mis ideas, ilusión e imaginación podían nadar. sonreía hermoso y no utilizaba maquillaje alguno que la hiciera ver artificial pues su rostro era por demás limpio... "Soy muralista" Dijo. Practico el tenis, sin embargo; no vivo económicamente de ninguno de los dos... Nuestra plática fue corta y bella (como un ocaso). Y tan hermoso recuerdo me dejó.
A Alejandro lo esperé a 7 minutos de distancia, "Sentado, y escribiendo hasta antes de estas palabras"... Mi tiempo demandaba otros intereses, tanto, como mi alma que abrazaba a la lluvia cual caía déste cielo suavemente; y esta a la ciudad.
No había reconocido aquel país adornado por la mañana' con un sol' que convertía los colores matinales en miel. Ya: en el otro lado de la frontera' de la nada nacieron nubes cargadas con gotas también.
Cruzé, Fernanda desapareció' y lo último que vi de ella han sido sus manos diciéndome adiós y una sonrisa que alcanzó a brillar. Lo hermoso desapareció, y me vi obligado a saberme en ubicación A pesar de la humedad que existía; un fétido y envolvente aroma "casi nauseabundo" con tono de hamburguesas' abrazaba a la fuerza y sin poder hacer nada para repelerle. Esto, muy contrario al abrazo y cuerpo de Fernanda, (De olor cálido cerca al frió), y un suave pulsar que le daba vida a ese ser. Sus labios sintieron casi los mios, y allí, vi como si el tiempo se hubiese detenido para observarnos, lamentándose de su desdicha y mi suerte. Su cabello lo sentí corriendo en mi cuello como hacen caballos libres en el campo.
Alejandro llegó a las 11:30am. subí a su auto ya con otra energía; pues el tiempo cambió' y mi suerte se ha querido vestir de novia. Partimos.
Juan Carlos era la razón de mi estar en aquel país de diferente idioma, el no hubo respondido a su móvil durante las llamadas' (las encontraría mas tarde)... Sin embargo; esto necesario, pues Alejandro Jair debía irse a la zinagoga y yo, el lo supuesto estaría yá con Juan Carlos (mi gran amigo) cual habría de recojerme en algún lugar. "No respondió".
Ante haber quedado abandonado a mi suerte, Jair (de buena fe) me invitó a la sinagoga con el. Yo, Siempre Siempre, dejo amigos en cada ciudad, en cada estado, país, "en cada puerto" ya que mi estar "no es muy estable cuando busco".
Viviana llegó por mí rápidamente' a una dirección cual Alejandro le había dado. ahí donde me dejó esperando. Mas tarde me volvería a reunir con el.
El tiempo con Viviana fue maravilloso. (Le debo mucho a esa chava por sus atenciones de toda la vida para conmigo) le agradecí tanto en mas de un abrazo y palabras que aún así, siempre quedo en deuda con ella. Esto, Hoy por ayudarme a deslizar en el tiempo suavemente, hasta que de nuevo apareció Jair, alcanzándonos en el muelle.
No fue si no hasta las 5 de la tarde del día siguiente cuando por fin pude abrazar a mi amigo: a su esposa y a sus hijos, Camille, la mayor y Franco.
El Paseo, el andar.
Juan Carlos, Alejandro y Yo' salimos de casa para realizar alguna diligencia, avanzamos con risas y nos rodeaban emociones, caminamos a la periferia' hasta que nos adentramos en un parque, donde fuimos presos y títeres de nuestras emociones que bailaban bajo la lluvia. Muchas risas hubo aquel día, tantas como las gotas de agua que empaparon nuestras ropas. Se formaron charcos y después ríos pequeños que perseguimos por entre ramales y hojarasca. Trepamos árboles y desde ahí' imaginamos valles y animales irreales donde no los había. Hicimos un columpio' con troncos gigantes caídos y también un sube y baja. Encontramos una cuerda atada a un árbol que nos sirvió para alcanzar al viento, cual emocionado también, "pues triste estaba" decidió sentir nuestros rostros y gritarnos de su presencia a los oídos.... No hubo pláticas tristes ese día; No hubo recuerdos que hayan quedado en duda. Todo lo imaginable lo proyectamos como negocio. también lo inimaginable "con unos pequeños ajustes". Detallamos todo, "hasta lo impoluto".
Comimos como la familia que antes fuimos, aunque faltaron miembros "Carolina y Daniela" y hubo nuevos. Franco y Camille.
A doc' según la utopia creada' todos ambicionamos lo mismo y es por ello será certero el tiro que lancemos "cualquiera que sea". me preguntaron por ti. (Por la del copetito dijeron)... respondí con la verdad.
No existe realidad cuando estoy con mi amigo, no cedemos sombra a la desgracia. Creo que si ella fuese real. nos tendría harto miedo y deciría' como siempre, sacarnos la vuelta. Las que se dijeron desgracias en su tiempo' Perecieron, como ocurre con todas las desgracias del mundo.
Quisiera contaros lo que hice en otra vida, en otros tiempos' Pues esto es solo un fragmento de los mas de mil escritos guardados en hojas de papel. Pero hoy, Hoy voy a cerrar los ojos y a soñar con lo que nunca dije.
te quiero Alejandra.
tu hermano Christian "abuelo"
No hay comentarios:
Publicar un comentario